Kaos Urbano en El Salvador from Aliadodelpunk on Vimeo.
Ayer tuvimos la oportunidad de escuchar en vivo a una de los mejores bandas de streetpunk-Oi! de todos los tiempos, a un grupo español que por primera vez pisaría suelo cuscatleco.
La cita fue a las 6 pm. Como es usual, el salvadoreñísmo afloró, y el evento inició 2 horas más tarde. La primera banda en tocar fue Skabulla, con buena acogida por el público.
Luego más bandas locales, animaron a la multitud con covers de bandas españolas como Non Servium, La Brigada del Vizio, Oi! Se Arma, entre otras.
Kaos Urbano no comenzaba a tocar, y muchos subnormales, que no pagaron su entrada, quisieron ingresar al local por la fuerza, golpeaban sin cesar los portones, de repente muchos cabezas rapadas (organizadores) corrieron hacia la puerta armados con bates de béisbol. Esa fue la primer señal que la noche no sería tan buena.
Tras unos minutos de violencia, todo volvió a la normalidad (o casi).
Al filo de las 23 horas se llegó la hora de ver a los madrileños, si, Kaos Urbano estaba frente a nosotros.
Los jóvenes y no tan jóvenes presentes, rebalsábamos de euforia. Comienzan las primeras notas y el mosh pit no daba tregua al más débil.
Al terminar las primeras cuatro canciones, el suministro eléctrico se interrumpió. La banda obligadamente, por este impase técnico, dejó de tocar.
Pasaron unos minutos y se volvió a escuchar el estruendo del portón primario siendo azotado por cascotes y botas militares. Esta vez, lograron romper el primer obstáculo que les impedía ver a los españoles.
Se cierra el segundo portón y la banda reanuda el espectáculo. Esto dura poco, y se vuelve a presentar otro corte de energía.
Al parecer, un hijo de puta, de los que estaba afuera del local, desconectaba a placer la trémula extensión que alimentaba los instrumentos.
Ya la gente estaba con los ánimos encendidos...
Se reanudó nuevamente el concierto, pero esta vez, Sku, menciona que solamente se les ha permitido tocar tres canciones más y luego dar fin al show.
A estas alturas, ya no se disfrutaba el concierto a sabiendas que siendo un hito en la historia del punk rock salvadoreño, solamente disfrutaríamos de 6 putas canciones.
Pero Kaos Urbano continuó y dio más de sí, siguieron tocando y prolongaron, a fuerza de huevos, el concierto.
Pero la combinación de alcohol, adrenalina y falta de ideales fundamentados hizo que durante el mosh pit, se calderan los ánimos. Y otra vez, la triste historia de nuestra escena, comenzó la trifulca. Como dice Bronka de Non Servium: "Puñetazos y patadas, todos tiran a matar".
Sonaba de fondo "Divide y vencerás" mientras se liaban a golpes estos Neandethales.
Así llegaba a su fin este concierto.
Ahora hago un par de conclusiones:
A pesar que en el lugar convivía un crisol de culturas, al inicio, hubo tolerancia. Se podía observar skinheads, punks, "hardcoreros", uno que otro rude boy.
Hasta un tipo con una cruz de hierro tatuada en la parte posterior del brazo derecho mientras lucía una camiseta de "Mad Ball".
Así como El Salvador es un país enfermo, así se encuentra nuestra escena, muy, muy enferma. La gente piensa que ser punk es emborracharse hasta estallar, liarla contra el que tienes a la par y cagarse en los conciertos.
Cosas como estas dicen mucho sobre nosotros, y dejamos un pésima impresión frente a la banda. Lo que la mayoría ni se imagina es que Kaos Urbano forma parte de una de las mayores asociaciones de grupos antifa de España y dado a estas conexiones, TODAS las demás bandas se enterarán sobre nuestra actitud pendeja.
No estamos preparados mentalmente para presenciar conciertos en general. Si hasta en los conciertos locales, pasa lo mismo, somos una escena DIVIDIDA.
Mucho menos podremos disfrutar de bandas como estas.
Siento pena, decepción y rabia a la vez, ya que por las acciones de unos pocos, todo se vino a la mierda y terminó mal.
Kaos Urbano se ha compartado muy bien, de eso de queda duda alguna. Hicieron lo posible por cumplir con su público.
Es por esto, que pido disculpas en nombre de mi escena, por nuestra actitud tan de tercer mundo.
Personalemente he invitado a la banda a regresar al país (previo a los penosos incidentes) pero me imagino que ya quedamos en su lista negra, y no creo que se animen a venir nuevamente a El Salvador, el país de los punks y skins de mierda, los jodelotodo, los eternos boicoteadores.
También agradezco a Unión y Fuerza, por el esfuerzo de traer a una banda de este calibre.
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